La programación neurolingüística establece que, para lograr un objetivo, debes concentrarte previamente en lo que deseas conseguir. De esta manera, puedes desarrollar una guía de recursos disponibles y orientarlos hacia el logro de dicha meta.
Cuando aprendes a reconocer y sacar provecho de los recursos y oportunidades disponibles, tu mente es capaz de llevarte fácilmente hacia tus objetivos.
Revisa tu estado actual.
Comienza eligiendo una meta que desees lograr y luego piensa en aquello que te inmoviliza o te produce insatisfacción, con relación a ese objetivo. Analiza tu estatus e identifica dónde te encuentras estancado.
Anota algunas preguntas que te ayuden a darte cuenta de dónde y por qué te encuentras estancado en este proceso, por ejemplo: ¿por qué no sigo adelante?, ¿es esto algo imposible de lograr?, ¿me considero capaz de lograrlo?, ¿qué concepto tengo de mí mismo?, ¿cómo es mi desempeño en cuanto a este objetivo?
Aprende a reconocerte y aceptarte.
Si no te aceptas tal como eres, difícilmente lograrás reconocer oportunidades que te permitan avanzar. El mayor impedimento para lograr tus metas es la poca autoestima.
Fotografía: Roy Reyna
Reprográmate de manera positiva.
Reformula tus objetivos y exprésalos con palabras positivas y en tiempo presente, por ejemplo: quiero alcanzar esto. Visualízate alcanzando tus metas y aprovechando los recursos y oportunidades disponibles. Incluye todas las sensaciones positivas que te provoca (sonidos, imágenes, sentimientos).
De esta forma, te sentirás capaz de reconocer las oportunidades que se presenten y utilizarlas como un impulso para lograr tus objetivos.
Enfócate y trabaja en el presente.
Si bien, pensar en el éxito futuro ayuda a mantenerte motivado, trabajar en el presente es lo que realmente te permite concretar acciones, encontrar soluciones y avanzar en tus proyectos.
Establece algunas metas diarias o de corto plazo, relacionadas con tu objetivo, de manera que vayas cotejando día a día las tareas ya completas. Esto te permitirá ir avanzando hacia tu meta y también entender qué pasos o acciones requieren mayor dedicación o recursos adicionales.
Enfrenta la crisis con determinación
Según la neurolingüística, todo tenemos el poder para cambiar el significado de las palabras dañinas o abrumadoras y transformarlas en mensajes positivos. Intenta cambiar el significado de la palabra “crisis”, por ejemplo, y de otros términos que en la actualidad utilizas para definirte a ti mismo. Reconoce cuáles son las oportunidades de aprendizaje, crecimiento y riqueza que estos términos involucran y utilízalos a tu favor y con determinación.
¿Cómo actuar con determinación?
Te recomendamos algunas técnicas de programación neurolingüística que te ayudarán a mejorar tu estado anímico y, en consecuencia, a lograr mayor determinación en tus acciones:
- Piensa en la situación que te molesta e inmediatamente comienza a formular preguntas relacionada con la solución, por ejemplo: ¿de qué manera puedo resolver este problema?, ¿qué necesito para solucionarlo?, ¿qué o quiénes pueden ayudarme?
- La postura de tu cuerpo juega un rol importante en la determinación; una postura erguida es signo de seguridad y autoconfianza y ayuda a mantener un buen estado de ánimo.
- Practica diálogos internos positivos, que refuercen tu autoestima y credibilidad en tus capacidades para lograr tus objetivos.
Todos podemos aprender a mejorar nuestra disposición y capacidad para reconocer las oportunidades y recursos disponibles en nuestra vida. Sólo debemos enfocarnos en lo que deseamos, alimentar a diario nuestra autoestima y trabajar con determinación en las tareas que nos llevarán hacia el logro de nuestras metas.
Alejandra Jiménez
Magíster en Teorías de Aprendizaje de la Lengua Inglesa